mayo 12, 2010

segundas partes

Raras ocasiones son en las que la segunda parte de alguna película es al menos igual de buena que la primera. De ahí el dicho, “segundas partes no son buenas” tal vez por eso últimamente para asegurar el “contenido” de las historias, las películas desde el principio se planean en dos, tres hasta siete partes como la del maguito, ya sea por coincidir con la adaptación del libro o simplemente de un solo libro sacan dos historias.

Pero en esta ocasión, dejemos de lado estos trucos o artimañas de las que se valen los estudios para asegurar las ganancias, y pongamos en tema dos películas que tardaron mas de dos décadas en sacar la segunda parte.

La primera es Tron (Steven Lisberger – 1982) en la que un joven Jeff Bridges encarna a Kevin Flynn, quien se interna en el mundo computacional (literalmente) teniendo que sobrevivir los “juegos de video”. Como seguramente ya la habrán visto, no me detengo mucho en esto, en su época fue un hit, ahora 28 años después, el mismo Steven Lisberger produce y escribe “Tron Legacy” (Joseph Kosinski-2010) donde el que fuera héroe en Eragon (Garret Hedlund) realiza el papel de Sam Flynn, hijo Kevin Flynn, quien también se vera forzado a ingresar al mundo que sobrevivió su padre.

Esperemos que la película no sea un mero pretexto para hacer gala de los efectos y realmente tenga una buena historia.

La otra película que trato es “Wall Street: El poder y la avaricia” (Oliver Stone-1987) donde Michael Douglas hace gala de sus virtudes actorales, que le valieron un oscar al mejor actor. Ahora, 23 años después llega “Wall street: The Money never sleeps” titulo que curiosamente es una línea de Gordon Gekko (Michael Douglas) en la primera parte.

Repite Michael Douglas en su papel y lo acompaña Shia LaBeouf, también repite Oliver Stone como director.

Ojala no decepcionen y no sean de esas películas que al tratar de revivir glorias pasadas, caen mas fuerte al piso.