Fue un actor, director y productor estadounidense, ganador de dos premios Oscar de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de Hollywood y un premio Globo de Oro de la Hollywood Foreign Press Association (Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood).
Con mucho talento y atraído por la interpretación, se unió a una compañía de teatro de Illinois, la "Woodstock Player's", donde trabajaba la que sería su primera esposa, Jacky Witte, madre de sus hijos Scott, Susan y Stephanie, y de quien se divorció en 1958, tras nueve años de matrimonio. Newman estudió interpretación en la prestigiosa Universidad de Yale y en el no menos mítico Actor's Studio de Lee Strasberg en Nueva York, donde coincidió con otras jóvenes promesas que tambien se hicieron un nombre en el cine de Hollywood: James Dean, Steve McQueen, Lee Remick, Geraldine Page, etc. En 1953 debutó en Broadway con la obra de William Inge Picnic, que permaneció catorce meses en cartel.
Tras varios papeles de extra, figurante esporádico y secundario con poco papel en varias series de la TV norteamericana ("Suspense" en 1949, "The web" en 1952), prueba suerte en el cine. Su primera película, The Silver Chalice ("El cáliz de plata" 1954) de Víctor Saville, cinta bíblica de lujosa producción y regulares resultados a nivel de crítica y público en su estreno donde compartía cartel con Pier Angeli o Virginia Mayo, ha sido descrita por el propio Newman como "la peor película de la década". Su primer éxito le llegó dos años después con un film de enorme repercusión a nivel internacional: Marcado por el odio (1956) de Robert Wise, en la que encarnó al boxeador Rocky Graziano en un papel al que también optaba Steve McQueen, y brillaba con una interpretación bastante notable al lado de dos jovencísimos Pier Angeli y Sal Mineo.
Su consagración definitiva como estrella de Hollywood se da en 1966 con su participación en una superproducción de cine negro que hace historia: Harper, detective privado (de Jack Smight supone una renovación formal y estilística de un género ya en decadencia pero que este film actualiza y reinventa -e inicia un subgénero que recoge Frank Sinatra en su trilogía sobre el detective Tony Rome en Hampa dorada, El detective y La mujer de cemento-, es uno de los films más taquilleros del año en medio mundo, y la crítica internacional arropa un film brillante que contaba tambien con Lauren Bacall, Shelley Winters, Janet Leigh, Arthur Hill, Robert Wagner, Julie Harris... Ese mismo año, Newman rueda su único film con Alfred Hitchcock: Cortina rasgada, al lado de Julie Andrews, que supone un fracaso comercial bastante inmerecido y que cuenta una interesante trama al hilo de la Guerra Fría. De aquí en adelante, la carrera del actor se consolida con películas de renombre y otras menos logradas pero de buena acogida: Un hombre de Martin Ritt (western psicológico donde Newman tiene un inolvidable duelo interpretativo con Fredric March y Richard Boone), La leyenda del indomable de Stuart Rosenberg (primer título del actor con este director, que será uno de sus talismanes en los 70, y todo un clásico del género carcelario de todos los tiempos, donde el actor queda inmortalizado para la Historia del cine junto a George Kennedy, Jo Van Fleet o Strother Martin), Rachel, Rachel (que supone su debut en la dirección, y una de las mejores radiografías de la condición femenina en la Norteamerica profunda, y otorga a Joanne Woodward una de sus mejores creaciones), Dos hombres y un destino de George Roy Hill (primera reunión de Newman con este director y con Robert Redford para uno de los films clave de los 60 que revisitaba e innovaba en el western crepuscular y lograba uno de los mayores taquillazos de la década, suponía el descubrimiento de la malograda Katharine Ross y arrasaba en la entrega de los Oscar), 300 millas de James Goldstone (reuniéndose de nuevo con su esposa en un film de carreras de coches que se apuntaba a la moda iniciada desde Aquellos chalados en sus locos cacharros en 1963 o La carrera del siglo en 1964), Comando secreto de Jack Smight (mediocrillo thriller británico donde Newman sale airoso junto a Andrew Duggan y Sylva Koscino frente a un guión bastante flojo), Un hombre de hoy de Stuart Rosenberg (su peor película pese a trabajar con su esposa y la inevitable química entre ambos), Casta invencible (su segundo film como realizador, logrado drama familiar con los rostros de Henry Fonda, Lee Remick, el hoy olvidado Michael Sarrazin y el propio Newman), El juez de la horca de John Huston (en su primer encuentro con este enorme director, en un remake de la legendaria y magistral El forastero de William Wyler de 1940, en compañía de una madura pero todavía sabrosa Ava Gardner), Los indeseables de Stuart Rosenberg (western otoñal infravalorado por la crítica, donde Newman trabajaba con Wayne Robson y Lee Marvin en un film luego imitado hasta la saciedad), El golpe de George Roy Hill (que supone la segunda película de Newman-Redford y todo un fenómeno social en el momento de su estreno, basado en una obra teatral de prestigio), y El hombre de Mackintosh de John Huston (thriller casi británico no maravilloso pero redimido por la actuación de Newman, James Mason y la fascinante Dominique Sanda).
La madurez interpretativa del actor llega con su aparición en la superproducción que, junto a la anterior Aeropuerto de 1970, inicia el subgénero de cine catástrofe: El coloso en llamas (1974), de Irwin Allen y John Guillermin, al lado de otras estrellas como Steve McQueen, Faye Dunaway o Richard Chamberlain.
En 1982 el cotizado actor resurge para ofrecer una de las mejores interpretaciones de toda su carrera, nominación al Oscar incluída, en la fenomenal Veredicto final de Sidney Lumet. Basada en un guión de David Mamet y con estructura teatral, Lumet construyó una pieza de enorme solidez, contundente y patética que deslumbra por su sencillez narrativa, los grandes trabajos de dos inmensos Charlotte Rampling, Jack Warden, James Mason y Milo O´Shea y su confeso coqueteo con el eterno cine de perdedores, tan querido por el cine norteamericano clásico. La historia de un abogado fracasado que se encuentra con un caso fácil en apariencia pero con trasfondo de poder -sin comparar con cómo se hubiese rodado en plan telefilm de sobremesa-, logra conmover de principio a fin
Una de sus últimas apariciones corresponde al film de animación de la productora Pixar Cars, en la cual aporta voz a Doc Hudson, uno de los personajes. El 25 de mayo de 2007, a sus 82 años, anunció su retirada definitiva del mundo del cine.[2] A principios de 2008 se le detectó un cáncer de pulmón y según los médicos le quedarían semanas de vida.[3]
2006 - Cars (voz)
2002 - Camino a la perdición de Sam Mendes
1999 - Donde esté el dinero de Marek Kanievska
1999 - Mensaje en una botella de Luis Mandoki
1998 - Al caer el sol de Robert Benton
1994
El gran salto de Joel Coen
Ni un pelo de tonto de Robert Benton
1990
Esperando a Mr. Bridge de James Ivory
Creadores de sombras de Roland Joffé
1989 - El escándalo Blaze de Ron Shelton
1986 - El color del dinero de Martin Scorsese
1984 - Harry e hijo de Paul Newman
1982 - Veredicto final de Sidney Lumet
1981
Ausencia de malicia de Sydney Pollack
Distrito apache: El Bronx de Daniel Petrie
1980 - El día del fin del mundo de James Goldstone
1979 - Quinteto de Robert Altman
1977 - El castañazo de George Roy Hill
1976 - Buffalo Bill y los indios de Robert Altman
La última locura de Mel Brooks
1975
Con el agua al cuello de Stuart Rosenberg
1974
El coloso en llamas de John Guillermin
1973
El golpe de George Roy Hill
El hombre de MacKintosh de John Huston
1972
El juez de la horca de John Huston
Los indeseables de Stuart Rosenberg
1971
Casta invencible de Paul Newman
1970
Un hombre de hoy de Stuart Rosenberg
1969
Dos hombres y un destino de George Roy Hill
500 millas de James Goldstone
1968
Comando secreto de Jack Smight
1967
La leyenda del indomable de Stuart Rosenberg
Un hombre de Martin Ritt
1966
Cortina rasgada de Alfred Hitchcock
Harper, investigador privado de Jack Smight
1965
Lady L de Peter Ustinov